¿Empate divino?


En un partido maratónico Chocarreros empató 4-4 con La Martona luego de estar perdiendo 0-4. En un encuentro donde mereció mucho más Sandi fue el que se vistió de héroe.




El fin del año se acerca, así también el de los torneos en el Agustiniano. Esta vez tocó jugar adentro. En el gimnasio, en ese lugar donde la temperatura aumenta con el pasar de los minutos y de las horas y donde no hay una correntada de aire. Allí fue donde Chocarreros logró una épica remontada.

Pero antes, como siempre sucede, la formación de un equipo que llegó con más bajas que el boletín de Sebas en la secundaria. El arco no estuvo defendido ni por Andrej Z ni por Beto “Araña” Attaguile. El que se puso los largos y el buzo (solo faltaron los guantes porque no los encontró) fue don Esteban Rivas quien vino de visita a Buenos Aires luego de haberse instalado y haber comenzado una nueva vida en el Sur (No en Banfield ni en Lanús, en Bariloche). La defensa fue de los más natural que se vio en el gimnasio. Andrej B y Eme se ubicaron en esa posición mientras que el tridente de ataque fue comandado por Sandi, Sebi y, para sopresa de todos, Andrej Z quien se puso los cortos y se calzó la 7 de Tomi. En el banco quedó, bah todavía no había bajado del colectivo cuando comenzó el partodo, Beto con la 19 en la espalda.

Se preguntarán dónde quedaron las otras figuras: Tomi decidió hacerla de DT ante la lesión que le produjo un compañero del equipo hace un par de semanas en un encuentro en la canchita. Los veteranos del team, el señor Macek y el Stric, no se hicieron presentes porque fueron partícipes de una marcha que se realizó en el centro a favor del tratamiento capilar y de rejuvenecimiento de la piel. Marito Belec quedó atrapado en un pozo luego de seguir un contingente de chicas que iban a celebrar Halloween y el faltante, Germán “no aparezco nunca” Klovobs, sigue con sus intentos de vender golosinas truchas y vencidas y por eso llegó a un convenio con un supermercado chino para poder instalar un “stand”.

Con todas estas bajas el equipo plantó cara y bajo un lema de buen juego y toques cortos (algo así como el Argentinos de Borghi) salió a buscar el partido y a no dejar agrandar al rival que en ningún momento pudo tener control de pelota y del juego. Con velocidad y buenos movimientos los vestidos con la casaca de eslovena generaron grandes situaciones de gol pero que no concretaron por la gran tarde del portero rival y por la poca puntería propia (Como el Chile de Borghi).

Las situaciones chocarreras seguían pero el que se puso en ventaja fue el rival en la primera llegada de la tarde. En ese momento los eslovenos perdieron un poco los estribos y los rivales aprovecharon eso para poner el 0-2 y 0-3 en un instante donde las propias no entraban pero la de los vestidos con la camiseta del PSG ingresaban sin problemas.

Siguieron las jugadas y llegadas del team pero sin eficacia y sin suerte. Tiros en los palos y en los travesaños hicieron notar que no era la tarde chocarrera y sí la de La Martona que consiguió el 0-4 en un primer tiempo donde el resultado moral debió ser al revés.

El árbitro sentenció el final del primer tiempo y las caras de preocupación, sorna y poco entendimiento se hicieron evidentes. Entre botella y botella las indicaciones fueron claras: “Salgamos con todo y demos vuelta este partido. Ya va entrar y les podemos ganar”.

Con esa idea de dejar todo el resto que quedaba el equipo salió a buscar el primer gol que le diera un poco más de aire y un poco más de confianza y, manteniendo el buen juego, las situaciones siguieron llegando hasta que Andrej se la pasó a Sandi y este abrió el arco y venció a un arquero que, hasta el momento, se veía invencible.

La cara cambió en el rostro de los jugadores chocarreros quienes empezaron a confiar en que podían remontar el encuentro y podían lograr una remontada única. Siguieron las situaciones y el juego al ras del piso y la suerte y definición cambió de equipo porque nuevamente Sandi, tras pase de Andrej, puso el 2-4 y la esperanza se acrecentó en los players.

Y el héroe se hizo presente nuevamente para estampar el 3-4 y poner emoción, dramatismo y mucho nerviosismo en los rivales que atinó a alguna jugada aislada pero que nunca logró hacerse con la pelota ni con el juego. Era todo chocarrero, las llegadas, la definición y el resto físico.

Y para poner un tono de “justicia” nuevamente el “10” puso el 4-4 en el marcador. Algo que hizo que en los últimos instantes del encuentro Chocarreros buscara el gol de la victoria y que el rival se defienda y se ponga más nervioso.

Pero hasta ahí llegó la remontada del equipo. El árbitro sentenció el final y, en un partido donde los eslovenos merecieron llevarse el triunfo por un abultado resultado, el encuentro terminó en una parda a cuatro. Una remontada épica y un resultado injusto. ¿Un empate divino?

One by One

#1 Esteban (8): Volvió a jugar después de un año y lo hizo de gran manera. Nada que hacer en los goles del rival y salvó varias veces la portería en el segundo tiempo. Bien con las salidas por arriba.

#12 Eme (8): Corrió, metió y se animó a subir. Marcó muy bien y cortó muchas pelotas cruzadas salvando posibles arremetidas del rival.

#4 Tuerca (9): Bien saliendo de abajo y animándose a pasar al ataque y generar juego. Tuvo sus chances pero como la mayoría no estuvo muy fino en la definición pero si en los pases.

#7 Andrej Z (8): Jugó en una posición que no es la suya y se movió bien. A veces se empecinaba y corría por toda la cancha. Bien con la pelota.

#10 Sandi (10): Sin lugar a dudas la figura del equipo con sus goles, sus corridas, sus asistencias y su entrega. En el primer tiempo dudó varias veces pero hizo un PARTIDAZO.

#13 Sebas (6): Empezó bien pero no estuvo fino en la definición. Llegó tarde a algunas pelotas cruzadas y en otras defendió bien. En la segunda mitad le dio una asistencia al goleador. Se hizo amonestar tontamente.

#19 Beto (8): No desentonó cuando entró. Se movió bien, se animó a rematar al arco y hasta generar alguna jugada. Cuando pasó a la defensa marcó bien al rival. Bien, araña.

DT Tomi (9): Tranquilo pero con muchas indicaciones. En momentos donde el equipo no encontraba los caminos en vez de insultar alentaba para que reaccionasen los jugadores. Bien.


By Kramer


Uno más y no jodemos más.



En, quizás, el último partido en el Torneo de 8, Chocarreros empató 2-2 con Los Tingueros en un encuentro donde lo pudo haber ganado, lo pudo haber perdido pero que terminó en una justa parda.

En un sábado caluroso, insoportable bajo el sol (Hacía 40º a la sombra) el conjunto vestido con la camiseta eslovena se presentó en el terreno de juego con dos ausencias imporantes. Dos de los tres goleadores del team no se hicieron presentes: Uno, Tomi,  por  quedar demorado en la comisaría 9 de Villa Ballester luego de ser encontrado en el Geriátrico de alado de su casa robando medicamentos y secuestrando a las señoras con fines comerciales. El otro, Lucho, al ver que no funcionó lo de vender en el recreo del colegio decidió dedicarse al intercambio de billetes “Evita” por dólares con la cara de Leslie Nielsen. Así y todo, hizo de director técnico del equipo. Eso sí, se tuvo que poner una máscara de Ruckauf para que no lo reconozcan.

Con estas bajas el equipo se paró con Andrej Z en el arco, una defensa atípica con Eme, Macek y Marito, en el medio corrieron Sandi, el Stric y Andrej y, un poco más adelantado, se paró Sebas en una especie de delantero solitario (Esquema a lo Bichi Borghi).

En el calor agobiante del fin de semana, Chocarreros salió con una idea futbolística: correr, marcar y tratar de salir de contra. Pero el partido se planteó de otra manera. Al comienzo ninguno de los dos equipos pudo hacer pie en la cancha y nadie pudo manejar los hilos del cotejo.

Si bien ambos equipos llegaron a los arcos, ninguno lo hizo de forma clara o de alguna jugada elaborada. Comienzo bastante chato para un partido que prometía mucho más. Poco a poco, Chocarreros se empezó a amigar con el balón y a tener la posesión de pelota pero sin llegadas claras.

En ese control de balón fueron los vestidos con los colores de Chacarita los que se pusieron en ventaja con un buen cabezazo de su delantero. A partir de ahí todo cuesta arriba para el equipo: El calor sofocante, un rival de jerarquía y la desventaja en el marcador.

El equipo, en ese momento, sacó a relucir el espíritu aguerrido, el espíritu del juego y el espíritu chocarrero y con un derechazo de Sandi más la notable ayuda del arquero rival (antes de jugar se confundió y en vez de ponerse talco se puso manteca en los guantes) empató el cotejo y, con más fuerza que estilo (gracias Les Luthiers) el team siguió atacando y logró ponerse 2-1 arriba con un gran tiro libre de Andrej B antes de la finalización del primer tiempo.

En el entretiempo, y con botella de agua de por medio, la idea del equipo era mantener la intensidad defensiva y el orden. Si bien había mucho cansancio las ganas de ganar podían más que todo.

En el segundo tiempo por las urgencias del rival y por las pocas piernas del equipo, Chocarreros, poco a poco, se fue arrimando a su propio arco y no pudo generar más de tres toques seguidos para poder salir del asedio tinguero.

Fueron pasando los minutos y las intenciones de los eslovenos eran más de defender la ventaja que de tratar de aumentar el marcador. Pero Tingueros, también con poca idea futbolística, fue generando algunas jugadas hasta que, después de un balón dividido, el delantero empató el cotejo con un remate después de una media vuelta y de agarrar a contra pierna al portero verdiblanco.

A partir de ahí el encuentro se volvió dinámico aunque con muchos errores y muchas imprecisiones pero con dos equipos que quisieron la victoria y quisieron irse a casa con una sonrisa en la cara.

Andrej salvó algunas jugadas de peligro y del otro lado pelotazos para que alguno la corra y genere situaciones o remates de afuera.

Los minutos siguieron pasando y el resultado, cada vez más, le fue sentando bien al partido y a los jugadores que prefirieron no perder en los últimos instantes.

El colegiado sentenció el final del partido y ambos equipos se saludaron en el que, quizás, sea el último encuentro de los jugadores chocarreros. Esperemos que haya uno más.

 One by One

AZ1 (6): En el primer gol compartió culpa con el resto de la defensa, en el segundo nada que hacer. En el primer tiempo bien con las salidas, en contraste con el segundo en dónde se apresuró.

Marito (5): Otra vez se confió de que la pelota se iba al lateral permitiendo al rival recuperarla y enviar el centro para el primer gol del rival. Mucha entrega y mejoró bastante la salida.

Machek (7): Compartió culpa en el primer gol. Bien en las salidas. Fue la pesadilla de los melli ahogándole un par de gritos de gol.

IL Eme (7,5): Si dejó de correr avisenle que se jugó un partidazo. De a poquito empieza a pasar la pelota y buscar la pared.

Tuerca (7): Buen primer tiempo con gol de tiro libre incluido. Falta resto físico. 

Stric (7): Otro valuarte del equipo. Salvo en el segundo gol del rival (despeja papá!), realizo una tarea quirúrgica, cortó casi todo lo que pasó por sus pies.

Sander (7): Aporte fundamental en lo psíquico para salir de lo que hubiese sido una derrota. De apoco el físico empieza a responder.

Seba (6): Cumplió en el pressing a la defensa y en el relevo con los hermanos Attackile.

Beto (6): cada vez que entró cumplió, tanto en el medio como abajo.


By Teto Medina

Un equipo aguerrido




Chocarreros superó 7-2 a Los Guerreros en un partido que, en un momento, se complicó y que pudo resolver gracias al goleador del equipo: Tomas Kastelic.

Luego de unos meses de huelga sindical (No había pago de viáticos y de alimento pero ya se arregló todo. Se definió que se me pagará una gaseosa cola y un embutido entre panes o, mejor dicho, el pancho y la coca), las crónicas volvieron y volvieron a lo grande. Incluso, regresaron con una victoria.

En un sábado extraño en cuanto a las condiciones climáticas (comenzó lloviendo y terminó con un gran sol) el equipo Chocarrero se presentó en la cancha de Fútbol 8 para enfrentar a Los Guerreros. Un partido que, a priori, se consideró fácil y muy accesible pero donde la verdad, por unos instantes, fue otra.

Con Andrej Z al arco, Eme, Macek y Andrej B en la defensa y un medio campo que ya se volvió costumbre: con Seba, Sandi, Stric y Tomi, el team se plantó con un 3-4 y con una idea clara, jugar por abajo y aprovechar el hombre de más. En el banco de relevos quedó Beto en solitario ya que Marito debió cumplir una fecha de suspensión por una tijereta digna de las peleas de Titanes en el Ring.

A este equipo le faltó un integrande: El señor Lucho “excusa” Klovobs hace una parva de encuentros que ni siquiera va a alentar y/o a dirigir. Se comenta, por los pasillos del Instituto Agustiniano, que el lungo llegó a un acuerdo con el Padre Daniel para poder vender Bidú Cola y Chicles Globo Ploc a los pebetes cuando se encuentren en el recreo.


Con esta formación el team salió con todo en el primer tiempo para no dejar reaccionar a unos Guerreros que poco hicieron en los primeros minutos. Rápidamente, y de los pies del pichichi Tomi (nada que envidiarle a CR7, Messi, Bracamonte o Pobersnik), el conjunto comenzó a sacar la luz de ventaja para controlar el cotejo.


Ante unos pasivos luchadores, Chocarreros siguió atacando (con más ganas que buen juego) y continuó sacando diferencia. El dos y tres a cero llegaron más rápido que una pizza un lunes a las tres de la tarde. Pero, a partir de ahí, la situación cambió. Guerreros se animó a atacar más y los eslovenos se dejaron estar. Mitad por la diferencia y mitad porque al tener uno más se confiaron un poco más.
 
Con una gran jugada individual y una mala salida chocarrera el rival se puso a tiro de manera imprevista y sorpresiva. Partido de ida y vuelta donde Chocarreros tuvo chances de sacar otro gol de ventaja pero que no pudo hacer. El árbitro pitó el final del primer tiempo y las caras de preocupación y exabrupto se vieron reflejadas en los rostros de los jugadores.

“Salimos con todo y lo liquidamos en los primeros diez minutos”, se oyó decir. “S
i no le sacamos cuatro de ventaja me corto los huevos…”, dijo uno de los referentes del equipo. Por eso, en la segunda mitad el team salió a derrotar y superar a unos Guerreros que soñaban con un empate heroico. Parda que nunca llegó.

Se vio el cambio de actitud de los jugadores, se peleó más, se corrió más y se trató de sacar una ventaja importante para poder controlar el partido. Eso sí, muy pocas veces hubo asociaciones y más de cuatro pases seguidos. Todo se basó en pelotazos, arrestos individuales y aprovechar los errores en la salida del rival.

El equipo no quería más sorpresas y quería sepultar alguna ínfima esperanza Guerrera que, dicho sea de paso, nunca atacó en la segunda parte.

Tomi, Sandi y Andrej fueron dándole color, forma y diferencia al marcador. La tranquilidad llegó a los cuerpos de los integrantes del equipo. Poco a poco, los rostros de preocupación, de enojo y de desasosiego se fueron cambiando por alegría, sonrisas y mucha buena onda.
La nota de color, en el segundo tiempo, la dieron Tomi y Eme que quisieron hacer una de los hermanos Korioto y terminaron pegándole como los hermanos Macana.

Los minutos siguieron pasando y el partido, ya liquidado, cayó en una meseta. Solo quedaron algunas llegadas de Chocarreros que terminaron muy lejos del arco.

El árbitro sentenció el final del encuentro y los tres puntos quedaron para los vestidos con la camiseta de Eslovenia que lograron la segunda victoria consecutiva luego de un arranque flojo. 

One bt One

AZ1 (7): Salvo en los dos goles, que fue una sinfonía de desaciertos, anticipó bien y siempre busco salir jugando

Tuerca (7): Bien en el juego, aportó llegada y gol. Hay que mejor la parte física.

Machek (6): Se llevó una invitación al patinando por un sueño. Sin muchas complicaciones. En el debe, proyectarse al ataque.

Il Eme (7): Como el tuerca, llegada y asistencia de gol. Pudo anotar el propio si hubiese patiado a la pelota y no a Tomi.

Beto (6): Cumplió. Estuvo cerca en un par, pero como delantero es un buen defensor.
Sander (6) mostró recuperación…perdón, preocupación por su estado físico. Todavía sufre el jetlag de tanta fiesta y exceso de “Jurgenmaister”

Stric (7): Cumplió, casi sin despeinarse contró el medio a gusto y piaccere. En el debe, zapatear al arco.

Seba (7): Tarea invisible en los relevos en defensa. Bien. En el debe, afinar la puntería 3 o 4 metros más abajo.

Tomi (8): Sigue de racha el pichichi, en medio tiempo liquidó el pleito. Se cecó de tanto patear al arco. En el debe, no enroscarse en discuciones arbitrales e internas (nos comen los de afuera).

Luho (0): Ni a mirar vino.

Marito (0): Purga fecha por arrojar tijera diabólica a incauto delantero.
 

 By Flavio Pedemonti